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¿Cómo crees que recordarás tu boda dentro de 50 años? ¿Recordarás tu voz? ¿Y la de tus padres? ¿Y su risa?… Las respuestas a estas preguntas cambia según si te decidiste por contratar tu vídeo de boda o no.
No podemos detener la vida para vivir eternamente en un momento feliz, pero si hay una manera de capturar todo el amor de un momento para hacerlo eterno, es la videografía.
Películas que documentan uno de los mejores días de tu vida y no exageramos. Es uno de los pocos servicios que, de no haberlo contratado en su momento, las parejas suelen arrepentirse de no haberlo hecho. Porque el inevitable paso del tiempo hará que valga aún más la pena tener un testimonio en movimiento de todo lo que sucederá durante vuestro gran día.
Y es que el día de la boda pasará volando. Y hay tantos momentos divertidos, emotivos, fugaces… que es imposible que, por mucho que lo intentes, todos queden grabados en tu retina.
Sería una pena que te olvidaras del último baile con tu abuelo, de cómo miraban a «su niña» tu madre y tu abuela mientras te ayudaban con el vestido, la voz temblorosa de tu pareja cuando te dedicó esas palabras… Vamos, que ya nos cae la lagrimita ¿verdad?
Y por si acaso tienes dudas, aquí nos tienes para tratar de ayudarte. Hemos hecho una selección de los mejores videógrafos de nuestras comarcas para que, en un rato y sentada tranquilamente delante de la pantalla que estás mirando, puedas comparar servicios, estilos, precios… sin tener que moverte. Ahí los tienes:
«No somos las chicas del vídeo, somos Tamen y Belén las videógrafas de vuestra boda» Así es como se presentan. Y es que para ellas lo más importante no es explicar todos los medios tecnológicos que pondrán a tu disposición para grabar tu película, lo más importante es el trato directo contigo. Y conocerte bien para contar tu historia de amor de la mejor manera, «porque no hay dos historias de amor iguales». Son de l’Alcora, pero están muy acostumbradas a hacer las maletas y seguir a sus parejas donde sea necesario. Y como su nombre dice, junto a ellas, «fabricaréis» vuestro sueño.
Dicen de ellos que son especialistas en recuerdos. Revivir, una y otra vez, con la misma emoción con la que vivirás tu día, la música, la diversión, las risas de los invitados, las anécdotas divertidas… Todo lo especial de ese día que hará que sea eterno y que no querrías, por nada del mundo, que se perdiera con el paso del tiempo. Os ofrecerán varias opciones para adaptarse al tipo de evento que buscas. En fin, que ponen a tu disposición todo su trabajo y experiencia para ajustarse a ti, a tus gustos y necesidades.
Si quieres una ubicación para ponerlos en el GPS te diremos que son de Santa Bárbara (Tarragona), pero donde será más fácil encontrarles es en plena naturaleza donde realmente sacan todo el provecho de sus sesiones. Te harán sentir protagonista de tu historia fotograma a fotograma. Suelen trabajar entre Castellón y Tarragona y no tendrán ningún problema en acompañarte donde haga falta. A ellos les mueven las historias y no les importan los kilómetros.
Jordi cuenta historias, historias diferentes, historias únicas, como sus parejas. Quiere diferenciarse de los videos tradicionales de boda y ofrecerte una película única, como será vuestra boda.
Su objetivo es conoceros para poder captar momentos de complicidad y emociones de uno de tus días más especiales de la vida.
Coge las palomitas de maíz y prepárate para ver el vídeo de tu boda como si fuera el tráiler de una película. Más de 10 años de experiencia en bodas avalan su trabajo, en el que su sello inconfundible son técnicas como cámara lenta, Time Lapse, Stop Motion, animaciones… Están totalmente dedicados a su trabajo, es su pasión y esto se refleja en el resultado final, lleno de detalles y calidad. Contacta con ellos. Una entrevista, les cuentas tu historia y ellos se encargarán de transformarla a través de su objetivo.
Eli Ribera Videografía es sinónimo de naturalidad, espontaneidad y discreción. No habrá poses forzadas. Hará que te olvides de la cámara y así logrará capturar la espontaneidad de los momentos únicos que vivirás el día de tu boda. Momentos de los cuales, ella y su objetivo, serán testimonios durante vuestro día. Pero, obviamente, esto no termina ahí; su gusto y cariño por su trabajo se reflejan en la edición y montaje que acaba de envolver, de forma delicada y moderna, el resultado de su trabajo final.
KOMOREBI
Komorebi es una palabra japonesa que no tiene traducción en nuestro idioma pero que habla de momentos únicos, bonitos e inexplicables. Posiblemente no haya mejor explicación para su trabajo. Están comprometidos y enamorados de todo el proceso que acompaña a los vídeos de bodas, incluida la emoción de sus parejas disfrutando de su trabajo por primera vez. Habla con ellos y, si surge la chispa, reviviréis el día de vuestra boda a través de su objetivo.
Y hasta aquí nuestras propuestas. Ahora te toca a ti. Curiosea y compara hasta encontrar al profesional que se adapte a tu estilo, a tu gusto y a tus necesidades. Entra en la sección de “videografia”, mira más trabajos, más opciones. Ponte en contacto con ellos, visítalos en persona. Piensa que, quien tú elijas, será responsable de convertir el recuerdo de tu gran día en eterno.
Imagínatelo, dentro de unos años, os sentáis tu pareja y tú para recordar todo lo que sucedió el día de vuestra boda y ¡ahí lo tenéis! Imágenes en movimiento y sonidos que se convertirán en eternos y que, si no es por el vídeo, se perderían por el inevitable paso del tiempo.
¿Tenías clara tu decisión antes de leer nuestro post? Cuéntanos tu experiencia o tu opinión sobre el tema, te leemos en los comentarios.
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